domingo, 6 de marzo de 2011

Haere Mai López


Hoy ha sido un día espectacular, de esos que hacen que las horas de viaje hasta aquí ya hayan merecido la pena, un día de esos en los que se te queda cara de tonto de tantas horas que pasas con la boca abierta por todas las cosas espectaculares que ves. En fin, un día de esos en los que me tengo que parar a pensar lo afortunado que soy por estar aquí y no me importa dar un poco de rabia.
En esta playa viven colonias de leones marinos y dos tipos de pingüinos, azules y amarillos
Todas las fotos son de la Península de Otago, un sitio del que David Bellamy, ese naturalista con barba que tenía un programa en la tele y aparecía entre las plantas, dijo que era el mejor ejemplo de ecoturismo que había conocido. ¿Alguien aprecia alguna urbanización?

HAERE MAI. Bienvenido a Nueva Zelanda.

Me doy cuenta que llevo aquí varios días y aún no nos hemos presentado, así que, al estilo de una guía, explicaré unos Fast facts about NZ o, en honor al que me puso el mote:

LA GUÍA DEL TÍO MATT – NZ

Nueva Zelanda tiene 4 millones de seres humanos y más de 40 millones de ovejas. Estés donde estés, miras alrededor y siempre ves ovejas. A pesar de ello, no hay queso de oveja. Aún no sé cómo pero tal desproporción entre personas humanas y ovejas en un país tan grande, debe generar algún efecto colateral sobre la población.
Como la población, hay blanquitos y morenitos
Los neozelandeses se dividen en maoríes, que son los indígenas y hablan un idioma ininteligible y los blanquitos, que tampoco hablan ninguna lengua que se pueda entender, aunque oficialmente hablen inglés. Los maoríes están bastante más integrados que los aborígenes australianos. Juegan al rugby y se saludan como David el Gnomo, frotándose la nariz.

Ah, malas noticias, Xena, la princesa guerrera, héroe de gays y lesbianas y cuyo origen se situaba en estas tierras, nunca ha estado en Nueva Zelanda. Lo he leído en una entrevista. Aquí el héroe nacional es Edmund Hillary, el primer blanquito que subió el Everest, que sí era de por aquí y no sólo eso, sino que era un humilde pastor de ovejas, lo cual les enorgullece aún más.

Nueva Zelanda es un país raro donde todo está del revés y boca abajo y no sólo porque sean una colonia inglesa, esa gente que se dedicó a hacerlo todo a su manera para diferenciarse del resto. De hecho, hoy he prestado atención para ver si el sol se pone realmente por el Oeste o si, como del pueblo de “Amanece que no es poco” se tratara, se pone por el otro lado. Mañana revisaré el mapa para ver si los ríos van hacia el Norte o hacia el Sur.

De los ingleses han heredado unas cuantas cosas como el mal tiempo, el césped, el gusto por la cerveza, el rugby y la famosa cocina británica, cuya aportación más sofisticada es el sandwich de jamón y queso con huevo cocido, todo un orgullo de la ciencia culinaria británica. También se parecen a ellos en que, a pesar de que parezca que va a nevar en cualquier momento y haga un viento de 80Kms/h, el personal va medio en pelotas.
Una bestia de 3 metros y 300 kilos que corren más de lo que parecen
Como decía, esta gente es rara porque beben como hooligans ingleses pero, a la vez, son más cívicos que los suizos y tienen más normas de conducta en las ciudades que en Barcelona. De hecho, temblad como Hereu se pase por aquí y vea la cantidad de carteles con prohibiciones y normas raras que tienes aquí. De hecho, empezad a practicar porque seguro que encuentra un motivo para justificar que se empiece a conducir por el otro lado.

A los habitantes de este país se les conoce como kiwis, pero no es por la fruta, sino por el animal nacional, un pájaro sin alas ni plumas, otro ejemplo de lo extraños que son porque, ¿a quién se le ocurre elegir ese bicho como emblema nacional? Bueno, la verdad es que un toro o un burro tampoco son ejemplos como para presumir.
Este es el único sitio en el mundo donde anidan albatros en tierra firme. Imízcoz, me acordé de ti porque algunos vienen desde Argentina
Sin embargo, parecería que este país es el infierno, cuando es un auténtico espectáculo de la naturaleza, con cantidad de animales que sólo se pueden encontrar aquí y que no dejan de sorprender. Además, la gente tiene un cierto espíritu de pueblo, de gente sana y amable. Todo el mundo te saluda por la calle, te sonríe y te ofrece ayuda en cuanto te ven perdido. De hecho, debe ser uno de los pocos países del mundo donde hacer autostop es algo habitual. Creo que me han dicho 50 veces “have a nice day”. A ver si mandan a las azafatas de Iberia una temporada por aquí.

La naturaleza extrema ya me lo esperaba pero lo amigable que es todo el mundo ha sido una muy grata sorpresa. Bueno, me cuentan que los habitantes de la isla del Sur, aunque no sean independentistas, piensan que los del Norte, donde está Auckland o la capital, Wellington, deberían convertirse en otro país porque han perdido ese espíritu campechano.

Espero que estos datos os hayan ilustrado algo. Seguiré preguntando para daros más información en unos días...
Sí, eso de ahí detrás es un fiero león marino o Sea Lion que dicen aquí. Hacía un frío que aún me dura en el cuerpo
Ah, ayer escuchaba a Juliette & The Licks, que consigue animar al más cansado de los caminantes, aunque la canción de la semana ha sido Anyone's Ghost, de The National.

It is not the mountain we conquer, but ourselves. SIR EDMUND HILLARY

No hay comentarios:

Publicar un comentario